Aquí tenemos una mantis religiosa uno de los mejores depredadores artrópodos. Con sus patas delanteras armadas con pinchos lanza un ataque veloz con el que atrapa a sus presas ademas tiene la mala costumbre de comerse a sus presas vivas. Durante el coito la hembra se come la cabeza del macho.
Vaya, que interesante.
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